[himno a la República]

Según se señala en diversos periódicos, la propuesta para la composición de un himno a la República es una iniciativa de Alejandro Lerroux, quien la incluye en el discurso final del banquete homenaje ofrecido a los autores de El ama, Luis Fernández Ardavín y Jacinto Guerrero, en el Hotel Victoria de Madrid, el 20 de abril de 1933:

"Hablaré como presidente del Círculo de Bellas Artes, del que soy un a modo da mascarón de proa. Ya que no hago en política lo que creo que por mi preparación puedo hacer, al menos tengo una garantía: la que me da el cariño y la confianza de lo más prestigioso de nuestras artes. La República está triste, como ha dicho una ilustre personalidad. Vosotros podéis contribuir a a que la tristeza no llegue a la médula del país y del régimen. Si la revolución francesa prevaleció en las almas y dejó rastro permanente es porque hubo un genio que supo resumir el encanto del espíritu francés: el autor do la Marsellesa. Nuestro himno actual, de tradición gloriosa, es viejo. No puede ser el himno de esta República. Buscad y recoged el espíritu de las esperanzas, del porvenir, e imprimidlo en un himno de hoy. Las realidades, nuestras realidades, sirven para inspirarse elocuentemente." [El Imparcial, Madrid, 21 de abril de 1933]